El espejismo de lo gratis: en busca de la red social perfecta (¿Tuenti 2.0?)
Hace poco me crucé con una reflexión en LinkedIn, cómo no podía ser de otra manera, siempre LinkedIn, que decía algo así como: “la red social ideal ya existió, se llamaba Tuenti” . Y tengo que admitir que algo dentro de mí hizo clic. La persona que publicaba el post venía a relatar las cualidades de lo que consideraba sería la red social ideal (y, por supuesto, gratis). Solo con tus amigos, sin seguidores ni “creadores de contenido”. Sin algoritmos que decidan qué ves. Sin anuncios, ni marcas disfrazadas de personas. Con grupos privados donde charlar sin ruido. Donde puedas subir una foto fea sin preocuparte de si da likes. Sin presión por construir una “marca personal”. Donde el valor esté en compartir, no en impresionar. Que no te absorba: que puedas irte y no pase nada. Que sea de verdad íntima, pequeña, cercana. Porque sí, tal vez no hemos vuelto a tener nada igual (aunque yo no lo creo, Tuenti no era para nada ideal y sí que intervenía en las interacciones y sí que estaban present...